El ministro de Defensa, Jorge Taiana, afirmó hoy que el dragado del Canal Magdalena “es un puente entre la Argentina marítima y la fluvial”, y que constituye “una obra imprescindible”, al tiempo que el gobernador Axel Kicillof lo destacó como “un verdadero hecho histórico”.
Tras participar este mediodía del acto de licitación pública para el dragado del Canal Magdalena, en Ensenada, junto al presidente Alberto Fernández y el gobernador de la provincia de Buenos Aires Axel Kicillof, Taiana consideró que se trata de “una obra trascendente, que sólo se puede explicar que no esté construido, por intereses pequeños pero poderosos que no han querido que se realice”.
“El Canal Magdalena es un puente entre la Argentina marítima y la fluvial, es una obra imprescindible”, subrayó el ministro en declaraciones a la prensa.
Y manifestó que “Argentina es un país partido, fracturado, que no se puede pasar de los puertos fluviales a los marítimos sin pasar por un puerto extranjero” y que ante ello, “el Canal Magdalena viene a cambiar esta realidad”.
Para el titular de la cartera de Defensa, “no hay país que no logre progresar y brindarle bienestar a sus habitantes si no desarrolla una logística con infraestructura, con capacidad amplia para distribuir su producción y que permita articular sus regiones”.
El ministro coincidió en ese sentido con el gobernador bonaerense, quien hoy en su discurso dijo que el Canal Magdalena “es nuestra puerta de acceso a un futuro mejor” y que la obra “significará una vía más ancha, que traerá ganancias de competitividad” para la Provincia.
La obra conectará el sistema marítimo con el sistema fluvial argentino, y favorecerá la integración de puertos del país, agilizando las exportaciones y mejorando la conectividad fluviomarítima, según explicaron fuentes oficiales.
“La construcción del Canal Magdalena es un verdadero hecho histórico. Y permite resolver un problema central. Hoy Argentina está partida: si un barco carga en algún puerto bonaerense como el de Escobar o del Río Uruguay y se propone ir a Bahía Blanca solo puede hacerlo desviándose a Montevideo, y recién ahí puede ir a otro puerto de nuestro país”, describió Kicillof.
Como consecuencia de ese escenario, alertó el gobernador, “nuestra soberanía está partida”.
“No puede ser que para unir dos puertos argentinos haya que atravesar una jurisdicción extranjera y pedir permiso, no tiene lógica”, insistió.
Y agregó: “Ese canal es una deuda que tenemos. No puede ser que tengamos que pedir permiso para navegar nuestros ríos. La solución se llama Canal Magdalena”.
También destacó el llamado a licitación para el Canal Magdalena el senador bonaerense del Frente de Todos Paco Durañona, quien la consideró “una obra estratégica para consolidar el sistema fluvial argentino por la que tanto peleamos”.
“Hoy es un día importante para la soberanía y el desarrollo nacional”, celebró en redes sociales.
En ese tono, el ministro de Justicia bonaerense, Julio Alak, afirmó que “el Canal Magdalena es soberanía y desarrollo”.
“Este objetivo estratégico cambiará la geografía económica, mejorando el comercio exterior y permitiendo desarrollar nuevos puestos de trabajo”, remarcó en Twitter.
Asimismo, Pedro Wasiejko, titular del Astillero Rio Santiago (ARS), dijo que el llamado a licitación para dragar la ruta fluvial conocida como Canal Magdalena constituye un paso estratégico para dinamizar la economía del país.
“Es una cuestión de soberanía nacional pero también es una forma de integrarnos al mundo ya que permitirá dinamizar la economía de nuestro país reduciendo los costos logísticos para los productos nacionales”, amplió.
Y agregó que desde el punto de vista competitivo, la posibilidad de navegar a través del Canal Magdalena sería clave porque permitiría “la reducción de costos de los fletes para las navieras y para los que transportan las cargas”.
Por su parte, el vicepresidente del Astillero Tandanor, Alberto Schprejer, detalló que la realización de las obras de dragado del Canal Magdalena “permitirá, como bien dijo Kicillof, resolver un problema de soberanía muy grave que tenemos: un barco que quiere llevar mercadería de Rosario a Bahía Blanca debe pasar por Montevideo vía Canal de Punta Indio, ingresando a Uruguay”.
Schprejer explicó que para completar esa ruta fluvial un buque que quiere ir desde un punto a otro de las aguas soberanas de la Argentina debe “pedir permiso” a Uruguay “porque no tenemos una vía directa que una los puertos fluviales con los marítimos”.
“El Magdalena es un canal natural, hay que dragarlo a más profundidad, pero es un canal que ya existe. Es muy importante desde el punto de vista económico, porque permite desarrollar una industria en la costa bonaerense alrededor de la espera”, concluyó el vicepresidente de Tandanor.
La apertura a la licitación para esta obra se produjo semanas después de que Kicillof y Taiana firmaran un acuerdo para avanzar en la construcción de distintos medios navales que requiere la Armada Argentina en los astilleros públicos de todo el país.
En el marco de ese convenio, Wasiejko acordó con el jefe del Estado Mayor de la Armada, Julio Guardia, construir en la planta naval de Ensenada un dique flotante para la base naval integrada emplazada en Ushuaia.
El acuerdo contempla avanzar en gestiones para que el ARS y Tandanor, los dos astilleros públicos, construyan de manera conjunta un buque de desembarco multipropósito, trabajen en la modernización de las Meko 140 y que el Astillero Río Santiago participe de la construcción del buque polar que está realizando Tandanor.